domingo, 19 de agosto de 2012

Lidiando con la muerte en Facebook

Por Ser Supremo (Geniuss of Whisky)

Me gusta Facebook. Más de lo que me gustaría que me gustara, porque a veces pierdo demasiado tiempo allí, y se me ha hecho compulsivo el abrir una ventanita cada 15 minutos para ver cuántas personas solicitan verme sin ropa. 

Facebook domina el universo hormonal del ocio, el stalkeo, la vanidad, las infidelidades y los memes. Facebook es la manera más práctica de socializar que tenemos hasta la fecha. Podemos estar en comunicación incluso en pelotas, o en los momentos que serían más bochornosos; usando un pants raído y del peor color posible, una camiseta de tirantes con una mancha de mostaza, desaseados, lagañosos, moquientos, etc; y del otro lado del servidor actuar como un dandi que tiene al mundo entre sus manos.

Hay tanto sobre nuestro comportamiento que se puede estudiar en las redes sociales que estoy segura de que no tarda en surgir un nuevo marco teórico de la psicología dedicado a ellas. 

Dentro de todo este universo de variedades, algo que particularmente me llama la atención y que nunca he entendido es por qué algunos escriben mensajes a personas que ni siquiera lo van a leer, tipo:

"Un dia como hoy pero hase 56 años naciste papa, gran hombre que a pesar de los problemas nunca nos has fallado a mi, a mi hermano lalo y a mi mamá, siempre estas al pendiente viejo. Grasias por todo lo que me has enseñado papa, feliz cumpleaños!!"

Lo curioso es que, en la mayoría de esos casos, el papá ni  siquiera sabe cómo usar Internet, y menos sabe qué chingados es Facebook; porque si lo supiera, ni puta madre que le escribirían algo así. ¡No tiene sentido!... ¡Ve y díselo, hombre! Está allí en el sofá, a cinco metros de ti, viendo la Liguilla.

También está el caso de las personas que te etiquetan en sus publicaciones para recibir un me gusta o comentarios. A mí no me importa siempre y cuando sean cosas interesantes o graciosas. Lo malo es que el tipo de personas que hace eso en el 98% de los casos son completos pendejazos con mal gusto y pésimo sentido del humor. Además está comprobado que estos subnormales suelen ser seguidores de Peña Nieto.

Pero la que se lleva el campeonato de los gritos desesperados de atención es sin duda la siguiente técnica: ¿por qué no llevarlo al extremo y publicar fotos de tu hijo muerto? Así, tipo  "¡aguanta, aguanta! Deja tomarle una foto antes de sepultarlo para subirla a Facebook y que 75,000 desconocidos le den like".


Yo sé que algunas personas se ofendieron con esto, pero piensen; ¿no es algo perturbador y auto-flagelador el guardar una foto de un hijo como recuerdo, ya no en su plenitud de vida, sino muerto, y exhibirlo así ante todo el mundo para recibir consuelo o atención, según les parezca?

Podría parecer una imagen bella y enternecedora, pero si se piensa en el trasfondo de la fotografía, la realidad puede ser muy distinta; el bebé no está sosteniendo el dedo de la madre, la madre levantó la mano del bebé con su mano izquierda, y con la mano derecha tomó la fotografía, muy probablemente pensando en las infinitas muestras de atención que recibiría en una red social de parte de extraños. COSIFICAR, ¿les suena esa palabra? Está más que nada asociada a ¡PSICÓPATAS! 

¿No es suficiente prueba de un grito de atención? Pues quizás algunas fotos en el cementerio en el día del sepelio lo sean; digo eso es algo que todos en alguna ocasión hemos hecho, ¿no?... ¿NO?...


"Bueno, pues gracias por venir... ¿qué tal si antes de irnos nos tomamos una foto junto a su tumba y...



..y después nos vamos a comer mole verde con una especie de pollo mutante crudo?"



Así es, esa fotografía está justo después de la del cementerio. Vamos, ¿no es eso un poco anormal? La neta no me sorprendería en lo absoluto ver a Hannibal Lecter comentando en cualquiera de las fotos de ese álbum.

No voy a poner el enlace hacia las fotos, porque seguramente alguno de ustedes iría a trolear. Sobre la dueña del perfil, por si les da curiosidad saber, tiene los rasgos característicos de una persona psicópata u oligofrénica; o ambas.

Solo para que quede claro, no me estoy burlando del sufrimiento de la gente; estoy dando un punto de vista analítico y objetivo sobre el comportamiento humano. Yo sé que la muerte es muy dura. Hasta el momento afortunadamente no he perdido a alguien muy cercano; pero estoy segura de que si eso ocurriera no le tomaría una foto a la persona que perdí y la subiría a Facebook para que la vieran mis amigos y miles de desconocidos.

La verdad no sé cómo es que Facebook lidia con la muerte de uno de sus usuarios. Supongo que cuando alguien que tenía una cuenta de Facebook muere, los familiares deben hacer una solicitud para que den de baja su perfil. 

En cuanto a eso no opino nada porque me parece algo completamente subjetivo. A muchos les gustaría dejar el perfil del fallecido para recordarlo, a otros no porque sería doloroso. A mí en lo personal sí me gustaría que me dejaran allí por un tiempo indeterminado (lo cual no sería un gran cambio con mi vida de ahora), al menos puedo servir para que mis amigos visiten mi granja y suban de experiencia.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Botellita de jerez todo lo que digas sera alreves...